Detrás del algún cuadro, piedra o zócalo suelen haber pequeñas arañas que no generan ningún tipo de riesgo para los seres humanos. Sin embargo, hay una en particular que podría resultar mortal a causa de su veneno: Loxosceles laeta, más conocida como ‘Araña de rincón‘.
¿Cómo reconocerla? La ‘Araña de rincón’ tiene color marrón tirando a gris claro, no mide más de tres centímetros, aparece en épocas de temperatura elevada y en lugares con poca luz. La misma suele picar cuando se la ataca y las hembras son más peligrosas.
Al efectuarse el ataque, en la zona afectada aparece una pequeña roncha de color rojizo que puede evolucionar hasta un tono violáceo, mientras que el dolor a causa de la picadura suele aparecer a las 4 u 8 horas. El hígado es el órgano que puede verse más afectado por su toxina.
En caso de sufrir alguna picadura, es recomendable poner hielo en la zona y asistir rápidamente a un centro de salud para evitar que su poderoso veneno llegue a las vísceras. Si el arácnido ya inoculó, se debe aplicar un antídoto en las 12 horas posteriores al ataque para que sea efectivo.
Loxoscelas laeta es nativa de América del Sur, es muy común encontrarla en Chile y también en países como Argentina, Ecuador, Guatemala, Perú, Uruguay y el sureste de Brasil. Asimismo, se encontró en América Central y América del Norte, aunque de menor manera.
Los síntomas tras la picadura
Después del ataque se siente un dolor intenso, similar a un pinchazo, y posteriormente una sensación de quemazón. En otros casos, aparece signos como agitación, escalofríos, fiebre, náuseas, sudoración y dolores de cabeza y abdomen.