En Coronel Suárez, autoridades sanitarias están llevando a cabo una campaña por las calles de la ciudad para pedir a la población que realice el descacharro en sus patios y jardines debido a la aparición de un ejemplar del mosquito Aedes Aegypti que, si bien no se encontraba infectado, es vector de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya.
Se trata de un trabajo en conjunto entre las áreas de Salud, Ambiente y Servicios Públicos, con el objetivo de concientizar sobre la enfermedad y promover medidas para evitar la reproducción del mosquito vector, se entregó material informativo por las calles del centro de la ciudad.
“El dengue es un mosquito domiciliario. Si sacamos los recipientes con agua en las casas, reducimos el 85% del riesgo de contagiarnos”, remarcó la doctora Diana Peralta, directora de Promoción de la Salud de la secretaría de la Salud, quien realizó especial hincapié en la tarea de limpieza y descacharro que cada vecino debe realizar, aún en los próximos meses de invierno, para prevenir la reproducción del mosquito Aedes aegypti.
Entre otras cosas, Peralta explicó que “en invierno no hay mosquitos adultos, pero sí sobreviven los huevos ya depositados, que son resistentes a las bajas temperaturas y pueden mantenerse en estado latente, hasta por un año, esperando la vuelta del calor y la humedad nuevamente, para eclosionar y continuar el ciclo reproductivo”.
El mosquito hallado en este distrito no estaba infectado con el virus del dengue, pero su aparición supone que pronto habrá más por esta zona.
De allí, se explicó, la importancia de trabajar también en la temporada invernal junto a toda la comunidad para adoptar medidas de prevención y realizar tareas de descacharrado, a fin de eliminar los posibles criaderos con huevos del Aedes y reducir así la población de mosquitos en la próxima temporada de calor.
La profesional recomendó la eliminación de criaderos potenciales de mosquitos mediante tareas de descacharrado es la medida preventiva más eficaz frente al dengue.
Además, descartar todos los objetos inservibles que puedan acumular agua de lluvia (como latas, botellas vacías, neumáticos y macetas, entre otros). A los recipientes útiles, como baldes y palanganas, es necesario vaciarlos y dejarlos boca abajo para que no junten agua. (La Nueva)