
En el marco del escrutinio definitivo, la Junta Electoral de la provincia de Buenos Aires ordenó la apertura de 18 mesas en diferentes municipios. La decisión se tomó tras evaluar reclamos presentados por apoderados de distintas fuerzas políticas y, según se aclaró, no tendrá impacto en los resultados generales de la elección.
El procedimiento consiste en abrir las urnas, retirar las actas o certificados de escrutinio y comprobar que coincidan con la información cargada. Si hay diferencias, se procede al recuento manual de las boletas.
La medida fue oficializada mediante una resolución firmada por la presidenta del organismo, Hilda Kogan, que habilitó la revisión en distritos como Berazategui, Lomas de Zamora, Bahía Blanca, Villarino, La Matanza, General Madariaga, General Pueyrredón, General Belgrano, Monte, Rauch y San Nicolás.
De los 29 pedidos de apertura de urnas que habían ingresado, 11 fueron rechazados por falta de fundamentos o porque no fueron ratificados por los apoderados partidarios. Las 18 solicitudes restantes comenzaron a revisarse en el Pasaje Dardo Rocha, sede donde también se llevó a cabo el escrutinio definitivo.
Desde la Junta Electoral se subrayó que la apertura de estas urnas no modificará el resultado final, ya que representan una porción mínima frente a las más de 40.000 mesas habilitadas en la provincia.