Al considerar que no había elementos suficientes para sostener la imputación por lavado de dinero contra la vicepresidenta, el magistrado firmó su sobreseimiento dejándola afuera de la investigación que se centró en la maniobra del blanqueo de 55 millones de dólares, y que tuvo como principal acusado al empresario Lázaro Báez.
La resolución se firmó después del pedido del fiscal Guillermo Marijuan que fue convalidado por dos organismos del gobierno, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Unidad de Información Financiera (UIF).
El magistrado consideró que se cumplieron “los requisitos de razonabilidad y legalidad” de esa petición, sobre la que se expresó “satisfecho”, por haber cumplido con “el ordenamiento legal” de análisis e interpretación de los elementos que obran en el expediente y que, tal como se reveló la semana pasada, no aportaron pruebas para hacer lugar a la imputación. (Infomiba)-
