
“Instamos a las autoridades de IOMA a retomar el diálogo que permita resolver esta difícil situación y al Gobernador a tomar cartas en el asunto en defensa, no sólo de los afiliados que se han quedado sin servicio, sino también de los más de 2 millones de afiliados de IOMA, que sufren la incompetencia y la falta de transparencia de la actual gestión”, cierra la misiva que lleva la firma de la FEMEBA.
El IOMA rechazó la protesta
Antes de que se confirmara la anunciada decisión de cortar el servicio, el presidente del IOMA, Homero Giles, había apuntado en duros términos contra los médicos. “Están evidenciando que la única opción que tenemos es desvincularnos por completo de FEMEBA”, había indicado luego de que la Federación adelantara que suspendería la atención de todos los afiliados de la obra social a raíz del conflicto que tiene epicentro en los municipios de Olavarría, Azul, Tapalqué, General Alvear, General Lamadrid, Daireaux, Laprida y Lincoln.
Estas localidades se sumaron a otras que enfrentaron conflictos a finales de agosto, cuando la entidad liderada por Giles decidió finalizar su relación con la Federación en once ciudades como respuesta a diversas irregularidades. En este contexto, quedaron fuera del convenio Junín, Alberti, Bragado, Chacabuco, Florentino Ameghino, General Arenales, General Pinto, General Viamonte, Leandro N. Alem, Colón y Rojas.
Desde ese instante, FEMEBA inició una serie de paros que afectaron a toda la provincia de Buenos Aires, frente a lo que el IOMA reveló que planea ampliar su red de prestadores profesionales y, mientras negocia con otros intermediarios, abrió una convocatoria para que aquellos médicos interesados en ofrecer sus servicios de manera directa puedan hacerlo.